Presentación

Bichito sufrido y discriminado como pocos, si los hay, por ahí vaga la mofeta... solitaria en su camino, incomprendida tal vez
En su adolescencia trató de ocultar sus rayas pintándolas a diario de color negro, bañóse cada dos o tres horas para ocultar su olor, y compróse los perfumes más caros para enmancipar su olor, más nada de esto le sirvió para ser partícipe de la sociedad.
Hoy se propone un nuevo reto, cansada de los cerebros sin cerebros no duda de su naturaleza; aunque trata de bañarse aunque sea una vez a la semana...
prefiere que la gente se aparte de su caminar a quitarse sus "glándulas olorosas" y quedar como los demás
Hecha la presentación abro mi espacio a mofetas que quizá anden sueltas por la vida tratando de ser quienes son.